Actualidad del Observatorio Español de la Economía Social

28/02/2008

Once ONG internacionales aprueban la primera Carta Mundial de Rendición de Cuentas del sector no lucrativo

Un importante colectivo de ONG que dependen en gran medida de la confianza de los ciudadanos, están viendo perjudicada su imagen por la mala gestión de algunas Entidades No Lucrativas, tanto a nivel nacional como internacional. Las organizaciones más grandes se han alarmado ante esta situación y claman una regularización mayor que acabe con las sospechas.

Concretamente, once importantes organizaciones internacionales de desarrollo social, medio ambiente y derechos humanos han aprobado públicamente la primera Carta Mundial de Rendición de Cuentas del Sector No Lucrativo. Se trata de las entidades Ayuda en Acción, Amnistía Internacional, Greenpeace, Oxfam Internacional, Alianza Mundial por la Participación Ciudadana, Consumers Internacional, Alianza Internacional Salvemos a los Niños, Survival Internacional, Federación Internacional Tierra de Hombres, Transparencia Internacional y Mundo YWCA.

El objetivo de esta Carta es demostrar que las ONG valoran profundamente la confianza del público y no la dan por sentada. Además, el documento establece valores básicos y principios de funcionamiento para las organizaciones internacionales, como el buen gobierno y la gestión, la recaudación de fondos y el compromiso de todas las partes.

La Unión Europea también ha tomado cartas en el asunto y ha decidido intervenir en la falta de transparencia de los lobbies en general, con la identificación de estos grupos de presión entre los que se incluyen las organizaciones no lucrativas. Su idea es crear un registro con el nombre y el objetivo de cada organización, lo que ha generado una gran polémica.

Las ONL en España

En España no existen normas comunes de obligado cumplimiento entre las ONG, y las cuentas no se encuentran disponibles de inmediato para que el donante pueda consultarlas. Dentro del sector no terminan de ponerse de acuerdo sobre las regularizaciones pero en lo que sí coinciden todas las entidades es en el reclamo de una mayor diligencia a las instituciones públicas como la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), encargadas de vigilar, entre otras cosas, las subvenciones públicas que reciben las ONG.

Sin embargo, sí que existen asociaciones y fundaciones con códigos de control y conducta estrictos, que remiten periódicamente sus memorias económicas y de actividad. Además, en el caso de los proyectos subvencionados con fondos públicos, los controles son mayores y las ONG con presupuestos superiores a los 300.000 euros se someten voluntariamente a auditorías externas.

La revisión de planteamientos afecta también a los propios ciudadanos, que deben implicarse en la lucha contra la opacidad y por la transparencia, exigiendo resultados de sus aportaciones y rendición de cuentas por parte de las ONL. "Rendir cuentas significa explicar qué hacemos, cómo lo hacemos, cuánto gastamos, con qué lo financiamos y qué resultados obtenemos; y debemos hacerlo con transparencia, ...", comenta José María Medina, presidente de la Coordinadora Española de Organizaciones no gubernamentales para el desarrollo (ONGD).

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