11/09/2025

La Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) pronostica que el año 2025 terminará con un aumento interanual del 15 % de jubilaciones de Trabajadores Autónomos o por cuenta propia, pronóstico que calculan según datos estadísticos del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. Tras un análisis de las cifras, la Unión informa que en julio de 2025 se contabilizaron más de 1.348.000 autónomos pensionistas, con una paga media de 1.010 euros al mes.

En 2024, la cuantía media de la pensión de jubilación mensual en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) era de 963 euros al mes, por lo que a julio de 2025 la paga media representa un incremento del 4,64 % respecto a la del año pasado.

En 2024 se produjeron más de 60.000 jubilaciones de trabajadores autónomos adscritos al RETA. De estas, 22.905 se generaron en los primeros cinco meses del año. En el mismo periodo de 2025 se contabilizado 26.526 nuevas jubilaciones, un crecimiento del 13 %. Según las fuentes consultadas por UPTA, los nuevos autónomos jubilados, en enero de 2025, tenían una pensión media de 1.155 euros al mes.

Envejecimiento entre los Trabajadores Autónomos

Tal y como advierte UPTA, el incremento de jubilaciones hace patente el envejecimiento de la población activa en el RETA, al igual que la ausencia de políticas de relevo generacional. Esta convergencia apunta a una reducción en el número de personas que coticen en el RETA en los próximos años.

Además, la Unión especifica que el RETA presenta actualmente un envejecimiento más acelerado que otros regímenes de la Seguridad Social, un hecho que, consideran, se debe a la estructura demográfica y las características propias del colectivo: «los autónomos están, en su mayoría, activos a edades más avanzadas y dependen casi exclusivamente de la pensión de jubilación, ya que tienen más dificultades para acceder a otras prestaciones sociales como la incapacidad permanente o el cese de actividad», advierten.

En cuanto a este factor, el presidente de UPTA, Eduardo Abad, asegura que, de no producirse un cambio estructural en las políticas de renovación del colectivo “el sistema podría sufrir un desequilibrio grave entre los cotizantes activos y los pensionistas. Es necesario formular y ejecutar un Plan Nacional de Relevo Generacional que venga a equilibrar el tambaleo que podría, a medio plazo, sufrir el sistema”.